Los viajes de las papilas Ep.2: el Thambili

I viaggi delle Papille Ep.2: il Thambili

En este segundo episodio de Los viajes de las papilas, descubramos juntos al rey de los cocos, el Thambili. Por sus propiedades refrescantes, esta fruta de diversas tonalidades es la mejor alternativa al aire acondicionado para afrontar el calor abrasador.

Originario de las islas del sudeste asiático, en particular de Sri Lanka, pero hoy en día muy extendido en algunas zonas de África, como Tanzania, el Thambili pertenece a la familia de los cocos. Es un tipo de fruta disponible todo el año. Crece de forma espontánea en los bordes de las carreteras, ya que no necesita ninguna intervención humana.
El agua de Thambili es mucho más dulce que el clásico coco, y cuenta con una serie de electrolitos y minerales que le aseguran propiedades hidratantes y refrescantes. Su producción se considera más sostenible que la de los cocos verdes jóvenes, que se cosechan antes de que la pulpa y la cáscara estén lo suficientemente desarrolladas para su uso.


La bebida energética natural que necesitábamos

Podemos dejar a un lado las latas de bebidas energéticas que encontramos en las estanterías de los supermercados y tomar un buen trago de agua thambili. Esto es todo lo que necesitas para obtener un impulso de energía después de un ejercicio o entrenamiento extenuante, ayudando a prevenir la deshidratación y la fatiga.

Thambili, rico en electrolitos, no sólo contiene mucho más potasio, cloruro y calcio que la mayoría de las bebidas energéticas, sino que también contiene menos sodio y azúcar.

Además…

Es bajo en grasas y azúcar y te hace sentir lleno. También contiene algunas formas de fibra dietética y aminoácidos que ayudan a moderar la absorción de azúcar en nuestro cuerpo y mejorar la sensibilidad a la insulina.

Actúa como diurético, teniendo también la capacidad de limpiar tu organismo de toxinas y otras sustancias nocivas.

Es un auténtico aporte vitamínico: contiene vitamina C y muchas vitaminas del grupo B.

Ninja de frutas en la cocina

¡Es hora de afilar tus cuchillos!

Para disfrutar mejor de Thambili, es necesario cortar el extremo del tallo de forma circular, con una ligera inclinación, creando un borde biselado. Seguimos cortando la médula blanca, hasta que la capa esté lo suficientemente fina como para perforar y extraer el agua. Una vez que se elimina el líquido, el interior de la cáscara tiene una capa suave, mayoritariamente gelatinosa, que se puede comer.

Se puede añadir a batidos o zumos de frutas.

NB: el agua de Thambili se puede conservar hasta tres días en el frigorífico.

Sabía usted que…

Durante la Segunda Guerra Mundial, se cree que los médicos militares inyectaron agua de thambili a los soldados heridos para facilitar las transfusiones de plasma. La sustancia tiene el mismo equilibrio electrolítico que nuestro plasma sanguíneo; debido a que es naturalmente estéril, no produce calor ni destruye los glóbulos rojos y nuestro cuerpo lo acepta fácilmente. En definitiva, es el perfecto sustituto natural del solución salina.

¿Te sorprendería si te dijera que el agua de Thambili es conocida como “el elixir de la vida”?