WAMI es buena agua dos veces. El primero porque brota del manantial de Pradis, un manantial mineral de montaña prístino conocido por sus propiedades organolépticas y uno de los niveles de sodio más bajos de Italia. El segundo, porque hace el bien, dado que cada botella comprada contribuye a la construcción de pozos en África, para garantizar a todos el derecho al agua potable.
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